Ni llorar ni reír, pero entender.

Ni llorar ni reír, pero entender?

Ni risas ni clamor, ni odio, pero entender: la máxima de Spinoza. El filósofo  invitó a dejar a un lado sus emociones cuando se trata de estudiar objetivamente un problema. La risa y las lágrimas hacen compartir el sufrimiento y la felicidad de los demás, pero impiden el razonamiento.

 

Un estudio puede dar crédito a esta teoría: Cuando se activan las áreas del cerebro responsables del pensamiento analítico, las áreas del cerebro responsables de la empatía entonces se inhiben. E inversamente.

Os dejo este video Emociones (Roberto Carlos) él nos dice:

Llorar o reír, lo importante es vivir.